Natación sincronizada: ¿Arte o deporte?
Vuelven por Navidad las chicas del equipo olímpico español de natación sincronizada
Sara Pujazón (Niebla)
El equipo español de natación sincronizada, formado por Gema Mengual, Ona Carbonell, Raquel Corral, Margalida Crespí, Andrea Fuentes, Thais Henríquez, Paula Klamburg, Irina Rodríguez y Cristina Salvador vuelven por Navidad con el anuncio de Freixenet haciéndonos disfrutar, con su ballet acuático, del arte de la natación.
Las nadadoras de este bello deporte deben conocer a la perfección todo su cuerpo; para ello se entrenan en otras disciplinas, como el ballet o el aeróbic. Prueba de ello es el resultado que obtienen en cualquier competición en la que participan, incluyendo la del anuncio de Freixenet, donde con unos movimientos tan perfectamente sincronizados, un vestuario tan dorado y esa magia que parecen poseer, las deportistas se confunden con las auténticas burbujas del champán.
Pero la realidad de este deporte es bien distinta. Las competidoras deben poseer una buena resistencia física, aeróbica y flexibilidad. Entrenan entre 4 y 8 horas diarias, según su capacidad y categoría como nadadoras. Pasan por lo tanto mucho tiempo en el agua y sus vidas, mientras compiten, son bastante sacrificadas.
Pueden participar en campeonatos que se celebran en todo el territorio español, según los niveles que hayan superado. Las competiciones de natación sincronizada pueden tener tres partes: figuras, rutinas técnicas y rutinas libres.
* Figuras: Las nadadoras deben ejecutar dos figuras obligatorias y dos figuras opcionales según el grupo de edad.
* Rutinas técnicas o ballet : Se ejecutan con música y unos elementos obligatorios marcados por el reglamento.
* Rutinas libres: tanto en música como en movimiento.
Las rutinas técnicas o libres tienen dos puntuaciones: la puntuación técnica y la puntuación artística. A todo ello, cuanta más dificultad, sincronización y coreografía, más valor alcanza, por lo que las notas son mas altas.
Para participar en la natación sincronizada se necesitan algunos elementos clave como: fuerza corporal, agilidad e interpretación musical. Todo ello se recoge en el anuncio de Freixenet: las nadadoras consiguen con sus movimientos una sensación tan espumosa que parecen ser las verdaderas burbujas del champán.
Vuelven por Navidad las chicas del equipo olímpico español de natación sincronizada
Sara Pujazón (Niebla)
El equipo español de natación sincronizada, formado por Gema Mengual, Ona Carbonell, Raquel Corral, Margalida Crespí, Andrea Fuentes, Thais Henríquez, Paula Klamburg, Irina Rodríguez y Cristina Salvador vuelven por Navidad con el anuncio de Freixenet haciéndonos disfrutar, con su ballet acuático, del arte de la natación.
Las nadadoras de este bello deporte deben conocer a la perfección todo su cuerpo; para ello se entrenan en otras disciplinas, como el ballet o el aeróbic. Prueba de ello es el resultado que obtienen en cualquier competición en la que participan, incluyendo la del anuncio de Freixenet, donde con unos movimientos tan perfectamente sincronizados, un vestuario tan dorado y esa magia que parecen poseer, las deportistas se confunden con las auténticas burbujas del champán.
Pero la realidad de este deporte es bien distinta. Las competidoras deben poseer una buena resistencia física, aeróbica y flexibilidad. Entrenan entre 4 y 8 horas diarias, según su capacidad y categoría como nadadoras. Pasan por lo tanto mucho tiempo en el agua y sus vidas, mientras compiten, son bastante sacrificadas.
Pueden participar en campeonatos que se celebran en todo el territorio español, según los niveles que hayan superado. Las competiciones de natación sincronizada pueden tener tres partes: figuras, rutinas técnicas y rutinas libres.
* Figuras: Las nadadoras deben ejecutar dos figuras obligatorias y dos figuras opcionales según el grupo de edad.
* Rutinas técnicas o ballet : Se ejecutan con música y unos elementos obligatorios marcados por el reglamento.
* Rutinas libres: tanto en música como en movimiento.
Las rutinas técnicas o libres tienen dos puntuaciones: la puntuación técnica y la puntuación artística. A todo ello, cuanta más dificultad, sincronización y coreografía, más valor alcanza, por lo que las notas son mas altas.
Para participar en la natación sincronizada se necesitan algunos elementos clave como: fuerza corporal, agilidad e interpretación musical. Todo ello se recoge en el anuncio de Freixenet: las nadadoras consiguen con sus movimientos una sensación tan espumosa que parecen ser las verdaderas burbujas del champán.
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